Jefa de estudios

Deyanira Edvardsen

Dance on the ashes of the fire they burned you with

El aire en la isla de Circe estaba cargado de magia y misterio la noche en que Deyanira nació. La luna llena iluminaba la escena con su pálida luz, proyectando sombras inquietantes sobre el suelo del bosque. Circe, la poderosa hechicera, había planeado cada detalle con precisión. Había elegido a un semidiós hijo de Bia, conocido por su fuerza y ferocidad, únicamente para poder crear a aquella pequeña arma que cargaba en su vientre.El parto de Deyanira fue una batalla salvaje y sangrienta. Los gritos de Circe resonaban a través de su morada, mezclados con antiguas invocaciones y maldiciones. El aire se llenó del olor acre de la magia oscura mientras la hechicera luchaba contra el dolor y las fuerzas sobrenaturales que rodeaban el nacimiento de su hija. Finalmente, con un último y desgarrador grito, la pequeña Deyanira emergió al mundo, envuelta en sangre y un aura de poder siniestro.En cuanto el primer llanto de Deyanira rompió el silencio de la noche, una presencia ominosa llenó la habitación. Bia, la personificación de la fuerza y la violencia, apareció en un torbellino de energía oscura. Sus ojos, pozos de intensa determinación, se detuvieron sobre la recién nacida. La atmósfera se volvió sofocante, y las sombras danzaron con una vida propia."Esta niña tiene mi legado.", declaró Bia, "Será fuerte y no sabrá lo que el remordimiento es, porque así es su destino. Pero cargará siempre con ser hija de su padre, en su sangre corre mi energía, y estará condenada a una vida de lucha interminable."Circe, con una mezcla de orgullo y frialdad, aceptó aquel decreto de Bia. Su plan estaba en marcha; su hija se convertiría en el arma perfecta que había imaginado para cargar su legado, una bruja cuyo poder iba más allá de la magia. Sin embargo, sabía que para que Deyanira alcanzara su verdadero potencial, necesitaba ser criada y entrenada adecuadamente.El nuevo hogar de la pequeña Deyanira sería un bosque, donde un aquelarre de brujas leales a la hechicera vivía en secreto. Estas mujeres, expertas en las artes mágicas y en los antiguos rituales, llevaban años viviendo a las afueras de Kirtan, donde nadie buscaba, y donde nadie las veía.Las brujas, con rostros serios y ojos oscuros que Deya nunca vio expresar sentimiento alguno, aceptaron a la niña con una mezcla de temor y respeto. Fue en ese momento que la vida de Deyanira comenzó, una existencia marcada desde su primer aliento por el poder de Circe y la condena de Bia. Las noches en el bosque estaban llenas de susurros y promesas de poder, mientras la joven semidiosa aprendía a dominar las artes mágicas.

𝗠𝗮𝗴𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗵𝘂𝗲𝘀𝗼𝘀:
La magia de huesos implica el aprovechamiento de la energía contenida en los huesos, calaveras u otros restos, para realizar prácticas mágicas como adivinación, hechicería o la búsqueda de comunicación con los espíritus.
𝗠𝗮𝗴𝗶𝗮 𝘃𝗲𝗿𝗱𝗲:
Tiene la habilidad de manipular la energía de la naturaleza y las plantas mediante la magia usando métodos como lo puede ser la creación de pociones para dar protección, enfermedades, transformar al consumidor en un animal, etc, de forma temporal.
𝗙𝗮𝗺𝗶𝗹𝗶𝗮𝗿 𝗺𝗮́𝗴𝗶𝗰𝗼 :
Puede formar una conexión con un animal o entidad para que le ofrezca compañía y asistencia. Este vínculo es único y solo es capaz de romperse con la muerte de alguno de los dos.
En su caso es una entidad con apariencia de serpiente (específicamente una cobra), la cual aumenta de tamaño cuando Deyanira siente miedo u odio y la protege de cualquier cosa.
𝗠𝗮𝗹𝗱𝗶𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗺𝗲𝗻𝘁𝗮𝗹:
Le permite lanzar una maldición sobre sus enemigos que corrompe su cordura, haciendo que sus pensamientos se vuelvan caóticos y desordenados. Su mente se vuelva cada vez más inestable con el tiempo de uso, por lo que puede usarlo un máximo de 15 minutos. Pasado ese tiempo, ella pasa a tener la misma pérdida de control mental que las victimas.
𝗖𝘂𝗿𝘀𝗲 𝗰𝗮𝘀𝘁𝗶𝗻𝗴:
Mediante la herencia mágica de Circe, tiene la capacidad de crear maldiciones para afectar seres vivos. Puede realizarlo mediante rituales afectando de forma directa a una persona o mediante un objeto, siendo este último el más fácil de ejecutar. Sin embargo, para realizarlas pierde gran parte de su energía vital, llegando a quedar en coma o desarrollar enfermedades si la maldición es muy grave o si decide que tengan amplia duración. De igual forma, son temporales y a lo sumo puede hacer que duren un par de meses, con consecuencias físicas notorias.
Las que puede realizar son:
Spectral Parasite: Un ente malévolo se pega al objetivo como un parásito, alimentandose de su energía y drenando su vitalidad, dejándolos débiles y vulnerables
Curse of the Lost Name: La persona maldecida es olvidada por las personas que la conocen, borrando su identidad y dejándolos varados en un mundo donde ya no son reconocidos o recordados por nadie .
*Al maldecir un objeto, el tiempo que la maldición permanezca en este es indefinido, pero los efectos de esta son temporales en cada portador. Es decir, el portador del objeto deja de sufrir las consecuencias de la maldición después de cierto tiempo, pero si alguien más se adueña del objeto maldito, va a sufrir los síntomas desde cero hasta que pase el mismo tiempo, y así a medida que tiene nuevos portadores.
𝗙𝘂𝗿𝗶𝗮 𝗯𝗲𝗿𝘀𝗲𝗿𝗸𝗲𝗿: Puede entrar en un estado de furia berserker por la influencia de Bia, lo que aumenta drásticamente su fuerza, velocidad y resistencia durante la batalla. En este estado, se vuelve físicamente mejorada en un combate, pero también pierde parte de su racionalidad y control, siendo totalmente controlada por su instinto violento.
No solo sirve en el contexto de guerra sino que puede perder el control y aparecer en cualquier tipo de confrontación que ella crea que puede llegar a algo físico.